¿Te vas a la playa o a clima caliente?

Así como empacas protector solar, gafas y traje de baño, tu piel también necesita prepararse para el sol, el calor, el cloro y hasta el viento seco. Durante las vacaciones, los cambios de clima, ambiente y rutina pueden afectar su equilibrio natural. Y si no te cuidas antes, durante y después… puedes volver con algo más que souvenirs: resequedad, manchas, brotes o sensibilidad.

La buena noticia: puedes prevenir todo eso con algunos ajustes simples (y un poquito de ayuda profesional).

¿Qué le pasa a la piel en vacaciones?

• Sol directo: Aumenta la producción de melanina (manchas), acelera el envejecimiento y deshidrata.
• Agua salada y cloro: Alteran la barrera natural de la piel, dejándola tirante o irritada.
• Brisa, arena, cambios de temperatura: Pueden generar microlesiones, brotes o sensación de ardor.
• Desorden en la rutina: Dormir menos, comer distinto o no desmaquillarte… también se nota.

¿Cómo prepararla antes de viajar?

Limpieza profunda o hidratación

Si estás pensando en hacerte una limpieza profunda o una hidratación profesional, lo ideal es hacerlo al menos 1 mes antes del viaje.

Esto permite que la piel se recupere bien y que puedas exponerte al sol, la piscina o el calor sin riesgos.

Rutina simple pero poderosa

Elige productos multitasking (limpiador, hidratante + fotoprotector) para no cargar tanto y seguir cuidándote incluso en el hotel o la playa.

¿Y durante el viaje?

• Usa protector solar cada 2 horas (y reaplica después del agua).
• Lleva bruma hidratante para calmar el rostro en momentos de calor.
• Evita el maquillaje pesado si sudas mucho o estás expuesta al sol.
• Limpia tu rostro bien en la noche, aunque estés cansadísima.

¿Y si ya volviste?

Podemos ayudarte a reparar tu piel con protocolos post-vacaciones, que incluyen activos calmantes e hidratación intensa.

Hidratación Casmara:
es un tratamiento facial con mascarillas profesionales que calman, nutren y refrescan la piel en profundidad. Es ideal después de vacaciones o exposición solar, ya que ayuda a recuperar el equilibrio, reduce la sensibilidad y aporta una hidratación inmediata.

Hydrash:
combina una limpieza facial profunda con una hidratación para recuperar la piel después de la exposición al sol, viento o contaminación. Elimina impurezas e hidrata con líquidos especiales lo que las vacaciones pudieron secar. Ideal para volver a la rutina con el rostro equilibrado y luminoso.

Ácido Hialurónico de hidratación:
potencia la hidratación en las capas más profundas de la piel, ayudando a retener agua y mejorar la elasticidad desde adentro. Así, la piel se siente más fresca, flexible y luminosa, perfecta para recuperar ese glow natural después del sol y las vacaciones.